Otra vez electorado confirmó su voto a favor de Mauricio Macri, lo que para muchos se trató de un dictamen anti kirchnerista. Tal como sucedió en Santa Fe con Miguel del Sel, el PRO fue el protagonista de las elecciones.
Con más de un 60% de votos afirmativos, el jefe de gobierno porteño se impuso sobre Daniel Filmus en un escenario que desde hace un tiempo se vio polarizado. Esta vez hubo menor respaldo al candidato Kirchnerista que en 2007, cuando Néstor Kirchner eligió al senador como su candidato a jefe de gobierno.
Macri al proclamarse ganador del comicio. Foto - AFP
Nuevamente el voto pareció ser a favor y/o en contra de uno y otro gobierno, que en teoría parecen ser caras diferentes pero en la práctica legislativa son los que más se han apoyado en las medidas (casi en un 70%). Tanto el Frente para la victoria como el PRO votaron en el plano general a favor, por ejemplo, de la desafectación del dominio público de tres terrenos de Catalinas Norte (15.000 metros cuadrados), al momento de realizar la reforma electoral, o mismo en la creación de la policía Metropolitana.
Por otra parte, también es cierto que el escenario de la Ciudad de Buenos Aires tiene la particularidad de parecer casi inalcanzable para el peronismo. Las últimas elecciones lo demuestran. De todas formas, ambas fuerzas consiguieron un mejor posicionamiento con respecto al obtenido en 2007, y han aumentado sus bancas legislativas (además de contar con la nueva figura de los comuneros en cada distrito).
Tras conocer los resultados parciales, la presidente felicitó a Mauricio Macri, quien ha creado una fuerza capaz de disputar la dirigencia en dos de los cuatro distritos más importante, como el pasado domingo en Santa Fe, cuando Miguel Del Sel quedó detrás de Antonio Bonfatti y ayer en la Ciudad de Buenos Aires.
Ciertamente las últimas elecciones demuestran que el panorama nacional no se ve tan sencillo para el oficialismo como se divisaba a fines del año pasado, o mismo como lo anticipaban varias encuestadoras.
De todas formas, el dirigente del PRO llega al 14 de agosto sin candidato presidencial y sin dar apoyo explícito a ninguna otra fuerza, a pesar de alguna simpatía con Eduardo Duhalde o guiños con Ricardo Alfonsín. Entonces, en una tendencia, al menos en dos distritos, de voto “no positivo” hacia el oficialismo, habrá que ver quien sea la oposición elegida por el electorado.
En menos de 15 días se elegirán quienes podrán ser los representantes de aquellos votantes que eligieron al PRO como oposición, o como modelo diferente al actual y como no, para aquellos que quieren una representación distinta. Probablemente ese día los argentinos nos llevemos alguna sorpresa.
No hay comentarios:
Publicar un comentario