Tres nuevas tomas ilegales de terrenos en los barrios porteños de Villa Lugano y Bajo Flores, y en la localidad bonaerense de Bernal, se sumaron ayer a otras tres situaciones similares en el área metropolitana.
La presidenta Cristina Kirchner salió a asegurar que la situación social “no se desmadró”, mientras que dirigentes de la oposición afirmaron que las tomas de tierras muestran el “fracaso” de las políticas asistenciales del Gobierno.
Unas 200 familias ocuparon el predio situado en Santander y Timoteo Gordillo perteneciente a la empresa Conteman. Los dueños estaban de viaje . “Hace 20 años que la empresa está acá y nunca tuvimos problemas con la gente de Ciudad Oculta”, expresó un empleado del lugar.
En Bernal se produjo una segunda toma ilegal de terrenos, ya que un grupo de personas ocupó una cancha de fútbol cercana al predio abandonado del frigorífico Finexcor. En el Bajo Flores, al menos 50 personas ocuparon durante la madrugada de ayer un predio perteneciente al Gobierno porteño.
En tanto, un grupo de personas tomaron en forma temporaria un terreno abandonado en el barrio porteño de Barracas. Los ocupantes aseguraron que provienen de la cercana Villa 21 -uno de cuyos extremos está ubicado a sólo unas cuadras de allí- y que realizaban tareas para desratizar y desmalezar el terreno, que tenía varios años de abandono.
La presidenta Cristina Kirchner salió a asegurar que la situación social “no se desmadró”, mientras que dirigentes de la oposición afirmaron que las tomas de tierras muestran el “fracaso” de las políticas asistenciales del Gobierno.
Unas 200 familias ocuparon el predio situado en Santander y Timoteo Gordillo perteneciente a la empresa Conteman. Los dueños estaban de viaje . “Hace 20 años que la empresa está acá y nunca tuvimos problemas con la gente de Ciudad Oculta”, expresó un empleado del lugar.
En Bernal se produjo una segunda toma ilegal de terrenos, ya que un grupo de personas ocupó una cancha de fútbol cercana al predio abandonado del frigorífico Finexcor. En el Bajo Flores, al menos 50 personas ocuparon durante la madrugada de ayer un predio perteneciente al Gobierno porteño.
En tanto, un grupo de personas tomaron en forma temporaria un terreno abandonado en el barrio porteño de Barracas. Los ocupantes aseguraron que provienen de la cercana Villa 21 -uno de cuyos extremos está ubicado a sólo unas cuadras de allí- y que realizaban tareas para desratizar y desmalezar el terreno, que tenía varios años de abandono.
Todavía resta saber que sucederá.
Por otra parte
la fundadora del comedor comunitario Los Piletones, Margarita Barrientos, declaró que el 80 por ciento de las personas que ocupan el parque Indoamericano ya tienen vivienda y que la toma fue alentada por punteros políticos con la promesa de subsidios. Al poco tiempo de sus declaraciones, una de sus hijas fue agredida en la cabeza con un ladrillo, mientras que la familia denunció que fue amenazada para que no hable.
"Con mi hermana estábamos barriendo la calle, porque ése es nuestro trabajo. Una mujer la señaló a ella, y le dijo a otra que era la hija de Margarita. Se vinieron y le abrieron la frente con un ladrillo", le explicó al Diario La Nación que Beatriz Barrientos, la otra hija de Margarita.
Policías
Seis integrantes de la Policía Federal, entre ellos un comisario, fueron separados de la fuerza tras haber participado del operativo de desalojo del Parque Indoamericano en Villa Soldati el día martes.. Además del comisario fueron separados un subcomisario, un oficial principal, un sargento y dos agentes, con el objetivo de “transparentar la investigación”.
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